miércoles, 21 de mayo de 2014
Borreguitos en el cielo
Tú siempre decías "borreguitos en el cielo, charquitos en el suelo", desde entonces cuando miro hacia arriba y descubro las nubes amontonadas con textura de algodón, ardó en deseos de calzarme las botas de agua.
La sensación es de una quietud infinita porque a ese nivel de empaquetamiento no le corresponde movilidad. Y sin embargo basta tomar dos segundos vista al cielo para descubrir la dirección del viento y sorprender a la nube grande comiéndose a la nube pequeña o a una nube anónima que se estira con elegancia y disimulo hasta alcanzar a la vecina sin molestarla.
En estos días, el sol, visto a través de las nubes, se vuelve pequeño y su brillo se parece más al de la luna llena. El aire fresco me recuerda la última vez que amanecimos en un camping y cómo tu presencia acallaba los miedos a ser comida por una gran nube...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario